BOC
Desde el 3 de abril de 1905
El equipo azul y oro, fue fundado por seis vecinos adolescentes hijos de italianos, de ahí el apodo «xeneize» (genovés). El gran ídolo de Boca, es Maradona, que en 1981, cautivó el corazón de los «bosteros» en una sola temporada con la consecución del Campeonato Metropolitano. Sumando torneos nacionales e internacionales, es el Club más exitoso y con mayor cantidad de títulos en la historia del fútbol argentino, lo que le convierte en el Club más campeón del país. Es el Club con más títulos internacionales oficiales en toda América. Juega sus partidos en «La Bombonera» y comparte con River el Superclásico, uno de los derbis más importantes del mundo.
HUGO Orlando GATTI:
«El loco Gatti». Todo un revolucionario de la portería, ya que le gustaba salir con el balón controlado, como un defensa más y atajar balones de manera poco ortodoxa. Es el jugador que más partidos disputó en Argentina (un total de 765 partidos) y el de mayor cantidad de penales detenidos (Un total de 26 penaltis, compartiendo el récord con Fillol).
HUGO Benjamín IBARRA:
«El negro». Lateral diestro eminentemente ofensivo, que muchas veces parecía más un carrilero o extremo que un lateral al uso, además de poseer un fuerte disparo. Militó en la entidad auriazul en tres etapas, tras breves pasos por Europa, marcando una época en la entidad de «La mitad mas uno».
ROBERTO MOUZO:
«Chacha». Defensa central leyenda de la escuadra boquense, el central surgió de las categorías inferiores del Club y es el que más veces ha vestido la camiseta xeneize con 426 partidos oficiales. Era un central de gran fortaleza física, con mucho coraje, de gran fiabilidad. Ganó 2 Copas Libertadores, 1 Copa Intercontinental, pese que no la pudo jugar por lesión, y 3 Ligas.
Jorge Hernán «PATRÓN» BERMÚDEZ:
«El patrón». Central. Colombiano. Defensa contundente y muy fiable que le dio mucha consistencia a la retaguardia bonaerense. Era todo un líder y mariscal de la defensa xeneize. En la era victoriosa del «Profesor» Bianchi, el colombiano fue el capitán del equipo, debido a su gran carisma y personalidad.
SILVIO MARZOLINI:
El lateral zurdo es uno de los mayores símbolos de la entidad. El defensa era un jugador atlético, elegante, de muy bien pie y que su cometido no solo era ser un marcador, sino que se sumaba al ataque, siempre con inteligencia y peligro, gracias a sus buenos centros. Dichas virtudes, le convirtieron en uno de los mejores laterales zurdos de su tiempo y de los mejores de la historia del futbol argentino.
SEBASTIÁN Alejandro BATTAGLIA:
Mediocentro defensivo. El jugador más laureado de la historia del club con 17 títulos. Fue un futbolista muy completo que jugaba como pivote, aunque quizás no excelso en ninguna faceta. Poseía una muy buena técnica, buen olfato de gol, un buen cabezazo. Pero su principal calidad era su despliegue, siendo muy solidario con sus compañeros y una garantía para cualquier técnico.
ANTONIO Ubaldo RATTÍN:
«El rata». Mediocentro defensivo. Era un medio organizador de enorme categoría, técnicamente muy dotado, con una personalidad y liderazgo muy poco común que le convertían en un auténtico caudillo en la cancha. El dorsal «5» en la historia xeneize le pertenece por derecho propio, nunca hubo ningún mediocentro como él en la historia de los de azul y oro.
MARIO Emilio Heriberto BOYÉ:
«El atómico». Extremo. Al contrario de lo que se estilaba en su tiempo, no destacaba por su físico, más bien era un delantero liviano, pero con mucha movilidad, por lo que solía jugar por escorado a banda derecha y sus diagonales en velocidad eran mortíferas para los rivales, donde sacaba a relucir su potente disparo. Además también era poderoso en el juego aéreo.
Juan ROMÁN RIQUELME:
«Topo Gigio». Era un jugador especial, jugaba de mediapunta, tenía una calidad técnica superlativa, una enorme capacidad de retener el balón y no perderlo fuera de lo común y una visión de juego que hizo la fortuna de todo delantero. Como xeneize estuvo en dos etapas, ya que estuvo en la Liga española durante cinco años, y siempre fue el líder indiscutible de los boquenses.
Diego Armando MARADONA:
«El pelusa». Rápido, hábil, goleador, y de disparo impecable. Jugó 5 años en Argentinos Juniors, obteniendo el récord de ser el máximo goleador del campeonato argentino cinco veces consecutivas, antes de llegar a Boca, que en tan solo una temporada se hizo eterno boquense para seguidamente dar el salto a Europa. Emblema del fútbol mundial. Para los argentinos… Fue Dios en la Tierra.
MARTÍN PALERMO:
«El loco». Delantero centro. Era un delantero tanque, no muy hábil con el balón en los pies, pero era un auténtico martillo pilón dentro del área y con una capacidad goleadora voraz, ya que iba muy bien en el juego aéreo, y poseía un potente disparo. Máximo goleador de la historia del Club con 236 goles en 404 partidos.
Esquema táctico: 4-2-3-1
CARLOS BIANCHI:
«El Virrey». Entrenador rígido y disciplinado, de equipos equilibrados y compactos, poco vistosos pero eficaces, ordenados desde lo táctico, siempre comenzaba planteando sus equipos desde el clásico 4-4-2 pero de estilo de juego sencillo. «Para conseguir títulos no sólo debes tener grandes jugadores sobre el campo, deben ser inteligentes» señalaba.
Suplentes:
ARRIBA: Roberto Eugenio «CHERRITO», Rubén José «CHAPA» Suñé.
MEDIO: Roberto Rolando «EL FLACO» SCHIAVI, Mauricio Alberto «CHICHO» SERNA, Ángel Clemente Rojas «ROJITAS», Carlos Adolfo «LUCHO» SOSA.
ABAJO: CARLOS BIANCHI (Técnico), JULIO Guillermo MELÉNDEZ, ÓSCAR Eduardo CÓRDOBA (Guardameta), ERNESTO LAZZATTI.
Mención especial:
ANTONIO ROMA (Guardameta), Ludovico «VICO» BIDOGLIO, ALBERTO TARANTINI, VICENTE Alberto PERNÍA, NATALIO Agustín PESCIA, MARCELO Antonio TROBBIANI, FRANCISCO Antonio VARALLO, DELFÍN Benítez CÁCERES, CARLOS Alberto Martínez TÉVEZ…